Alberto Cuevas: cuando la pasión cofrade sale a borbotones

Alberto Cuevas, pregonero de la Semana Santa'09 de Constantina, en el acto de entrega de pastas. Foto. Robledo Heras Hierro

Sollozo compungido con olor a incienso en los rincones de la ciudad es lo que en estos días se respira en la hermosa Sevilla. Y, como en la canción de Arturo Pareja- Obregón, da igual pasear por Sierpes o la Plaza Nueva o por cualquier callecita del centro, tan estrecha,... toda Sevilla está sumergida ya en la pasión de la Semana Grande, de la Semana Santa. Pero no sólo la capital, un manto color granate bordado con hilos de oro y plata recorre toda la provincia y acrecienta a su paso las pasiones cofrades, sentimientos con unas gotitas de alcanfor y oraciones íntimas guardad cajón lleno de esperanzas.

"(...) En la Campana o en la calle Mesones,

en la Resolana o Llano del Sol,

a flor de piel las emociones

de tu cofrade corazón"

(De 'Corazón Cofrade', por Florencio Domínguez Tutor y dedicado a Alberto Cuevas).

Alberto Cuevas y su Constantina de fondo.

Así, y rodeada por la belleza de la Sierra Norte sevillana, Constantina cuenta con una sólida tradición de Semana Santa: sus orígenes datan allá a finales del s. XVI que "nos trasladan al nebuloso mundo de la memoria en el tiempo para llegarnos con aires fraciscanos de aquel convento de La Corredera desde donde se difundió con devoción a la Vera Cruz y al Stabat mater de la Soledad de María" (En Ortiz Gómez, J.L: 'Y se hará la luz'.Revista Bulevar, nº 26). Y esos siglos de tradición se mantendrán más vivos que nunca si cabe gracias a la frescura y la ilusión depositada por el joven pregonero de esta Semana Santa'09: Alberto Cuevas Caneo.

Cristo de la Humildad y la Paciencia de Contantina. Foto: Salvador Contreras

A sus 26 años, Alberto Cuevas es un enamorado de su Constantina natal, -la cual defiende a ultranza allá por donde va-, de sus tradiciones más arraigadas pese a su juventud y de su historia, -sobre todo gusta rebuscar entre las páginas que dejó escritas la Guerra Civil espàñola en su pueblo. Licenciado en Periodismo por la Universidad de Sevilla, comenzó su andadura profesional en Onda San Pablo Radio e Hispalis Televisión; actualmente es redactor en la empresa Ceimagen, en labores de Comunicación y Seguimiento de Prensa para las principales entidades políticas, deportivas y financieras de Andalucía.

Carmen Alcázar: Pero, ¿quién es Alberto Cuevas, cofrade?

Alberto Cuevas: Un joven cuya mayor afición en la vida es la Semana Santa. Por ella pierdo el 'sentío' y no sólo en fechas tan cercanas como en las que nos encontramos, sino todos los días del año.

Y es capaz de conocer los entresijos de la historia de las distintas Hermandades, ya no sólo de Constantina sino también de Sevilla: sus Hermanos Mayores actuales, los anteriores, los miembros de la Junta, el número de penitentes, las paradas, las distintas bandas que acompañan a las cofradías,...y aprovecha cualquier momento para ese perder el sentío, para dejarse llevar por la emoción, esa que le sale a borbotones de su cofrade corazón al escuchar entre cornetas y tambores marchas que le encogen el alma, soñando con asisitir a su cita el Domingo de Ramos en su Constantina.

Porque como el mismo nos cuenta "sin el día a día con las hermandades, el sabor cofrade es diferente", desde bien pequeñíto, Alberto ha estado ligado a la Hermandad de la Amargura de Costantina: ha pertenecido al grupo joven durante seis años, llegando a presidirlo en 1997; también ha sido Secretario Primero de la Junta de Gobierno durante cinco años, así como director de su boletín y responsable de comunicación de la Hermandad. Actualmente es miembro de la Junta Auxiliar de la misma. Además en su faceta cofrade encontramos que es hermano de las Hermandades de La Borriquita y la Hermandad del Robledo de Constantina, y también de la Hermandad de la Macarena de Sevilla.

Carmen Alcázar: Y, ¿cómo es ese momento en el que uno recibe la noticia de que va a ser pregonero? ¿qué se te pasa por la cabeza en ese momento?
Alberto Cuevas: Sentí una emoción tremenda, emoción que me dura todavía y que fue, sin duda la que me llevó a escribir las primeras líneas del pregón. Me lo comunicó Francis, el Hermano Mayor en presencia de mi padre. Después llamé a toda mi familia para decirselo, sobre todo a los que están fuera. Fue muy emocionante la verdad, y más ami edad en la que te lo esperas aún menos.

Pero, sin duda alguna, su juventud no está reñida con el alto grado de implicación en todo lo que le realmente le apasiona. Dice contar los días que quedan para el gran día, y embriagado por la emoción, es consciente de la responsabilidad que conlleva ser pregonero en su pueblo y las muchas miradas de las que será objeto. Por eso, ante el atril en la Parroquia de Santa María de la Encarnación, sólo espera no defraudar a los que le confiaron esta tarea y que los nervios no le hagan temblar la voz ni las rodillas,... aunque de seguro, le temblará el corazón y se le escapará alguna lágrima.

Carmen Alcázar: Dicen que todos los cofrades tienen un pregón guardado en un cajón del alma, ¿desde cuándo tienes el tuyo?
Alberto Cuevas: Escrito en mi alma, desde hace mucho. Cuando empecé a estudiar Periodismo, siempre soñé con el día que diera el pregón de mi pueblo; y ese sueño se cumplirá el próximo 29 de marzo.

Sin embargo, parece díficil salir de los cánones que rigen la redacción del pregón de Semana Santa, aunque Alberto intentará ofrecer un pregón lleno de recuerdos y de historia constantinera, mezclado con pasajes oríginales e inéditos; pero también actual y acorde con la sociedad constantinera, consciente de sus necesidades como la que apunta en el ámbito de Semana Santa: "necesita recuperar nazarenos ya que el número de penitentes ha descendido en líneas generales". Pero lo que más sorprende del pregón de Alberto es como a base de tesón y constancia, ha conseguido plasmar su pasión en versos y estrofas de rima extremadamente cuidada para que el próximo domingo no falle ni el más mínimo detalle.

Carmen Alcázar: ¿A quién va dedicado tu pregón?
Alberto Cuevas: Sobre todo a mi familia porque ellos son los verdaderos responsables de que yo me asome a ese atril.

A penas quedan unas semanas para la Semana Santa' 09, y si de algo estoy segura es que el pregonero oficial de la Semana Santa de Constatina, Alberto Cuevas no defraudará ni un ápice con sus composición, entre rimas y genialidades desde esa pasión cofrade que le rebosa. Y allí, en la iglesia de su tierra, la Parroquia Santa María de la Encarnación, conseguirá poner los bellos de punta a todos los costantineros de devoción, y a los que posiblemente nos encontremos acompañándolo en ese día tan esperado por este buen periodista, inusitado poeta para la ocasión, mejor compañero y amigo. Con todo, ya se cuentan horas para ese día grande y para que, sin duda, Alberto Cuevas Caneo se escriba en grande en la historia cofrade de Constantina.