Leticia Zamorano impregna de su esencia minera en ArtSevilla

Cartel ArtSevilla

Desde que utilizara la denominación para Nervae en 2011, la llamada G80 sigue imparable; cada uno de sus miembros, en cada una de sus modalidades, van dando pasos, algunos más pequeños, otros gigantes, a diferentes ritmo y tempos, a sus distintas maneras, -qué mas dá,- continúan trabajando por lo que les mueve y cosechando éxitos que me llenan de orgullo no sólo como nervense sino por compartir dicha generación; esa misma de la que es: Leticia Zamorano.

Obras de Zamorano
en ArtSevilla

No hace demasiado reseñábamos aquí en Yo Periodista su última muestra individual y primera en el Museo Vázquez Díaz de Nerva y más tarde en el Casino del Centro, "Los Estratos del Tiempo" y con la que conquistó a todo aquel que la visitó por su sello inconfundible: poniendo la tierra en los pinceles como materia que emana de su propia piel y su alma "minera sólo minera" en cada uno de sus lienzos. Y de Nerva a ARTSevilla, "casi ná"...

Y es que desde ayer, y hasta el próximo domingo 18 de octubre, se celebra en Sevilla la I Feria de Arte Contemporáneo ArtSevilla y las tonalidades únicas de colores imposibles de nuestra Cuenca Minera de Riotinto están muy presente en ella gracias a la participación de la pintora nervense Leticia Zamorano, cuyos trabajos se exponen en esta edición de ArtSevilla con la Galería malagueña Javier Román en el módulo 14 del Palacio de Exposiciones y Congresos de Sevilla (Fibes).

Galería Javier Román en ArtSevilla

La pintura de Leticia Zamorano (Nerva, 1984) se caracteriza no sólo por imprimir el cromatismo autóctono de la zona sino sus texturas y sus relieves e incluso, – por qué no-, su característico aroma, más allá de las construcciones sulfurosas y las profundidades de la cotidianeidad de nuestra comarca. Desde muy pequeña se entretenía mucho dibujando y experimentando: “mis primeras pinturas estaban hechas con café, azafrán, hacia una especie de collages con todo lo que me iba encontrando”. Enamorada del paisaje minero, asegura que en sus obras esta patente el impacto visual de su entorno “sobre todo en la utilización del color: en mi pintura prima generalmente los rojos”. De hecho, en sus lienzos se distingue una evolución técnica: desde la pintura más licuada hasta una más gruesa, con empaste más denso, jugando con las texturas y reinventando relieves; como bien explica el director del Museo Vázquez Díaz, Juan Barba, “ese cuadro matérico que antes construía con polvos minerales de esa misma roca, solo quiere darle unas pinceladas o quizás no, es un trozo del paisaje, su paisaje, expuesto a la contemplación de todos”.

Galería ArtRomán ArTSevilla

Y esa continua experimentación pictórica le persigue casi a diario: “cada vez que puedo, recorro el río en algunos tramos, tomo fotografías, recojo tierras,… sigo alucinando con el paisaje minero como si fuera la primera vez que lo veo”, confiesa Zamorano. De hecho, esta joven artista de la llamada “G80” mantiene una interacción constante con el entorno minero para la consecución de sus obras; prueba de ello es su participación en el proyecto provincial “Mina de Estrellas” en ARCOMadrid- 2014 o en las recientes intervenciones artísticas colectivas del Puente Azul en Berrocal y en Primavera en agosto en Nerva, así como en su dos últimas exposiciones sobre el río Tinto en Sevilla, bajo el título “Las entrañas de la tierra (I y II)”. Asidua en el Certamen de Pintura al Aire Libre “Villa de Nerva” y de muchos eventos culturales y artísticos de su pueblo ( ilustraciones en La sonrisa de Lidia, 2014), ante su último proyecto, la ya citada “Los Estratos del Tiempo”,ante la que “uno tiene la sensación de ser engullido por una fuerza ajena a la vez que propia, una intensión que desmarca lo habitual y selecciona lo esencial”, en palabras de Pepe Álvarez.